El emblemático juego Flappy Bird, que se volvió viral en 2014, prepara su regreso con una propuesta novedosa: integrar tecnología blockchain, recompensas digitales y una nueva forma de propiedad intelectual en cadena.
Origen y legado del clásico
Creado por Dong Nguyen, Flappy Bird se hizo famoso por su jugabilidad sencilla pero desafiante. El jugador tocaba la pantalla para que el pájaro pasara entre tuberías, y su adicción viral lo convirtió en un hito de los juegos móviles. Sin embargo, a poco tiempo de su lanzamiento, Nguyen lo retiró de las tiendas digitales, citando el notable impacto que la adicción estaba generando. A pesar de su retirada, el juego quedó como un ícono cultural.
Primeros pasos hacia el Web3
En 2024, la Flappy Bird Foundation, que adquirió los derechos del juego, lanzó una versión en Telegram llamada Flap‑a‑TON, basada en la blockchain TON. Esta versión incluyó funciones play-to-earn, permitiendo a los jugadores acumular puntos en una fase beta que atrajo a más de un millón de usuarios. Sin embargo, la fase de minería terminó sin repartir tokens, y la versión posterior en Android se lanzó sin integración blockchain.
¿Qué trae la nueva versión Web3?
La Fundación anunció una evolución significativa con un nuevo juego Web3, que ofrecerá:
Recompensas digitales y activos adquiribles en blockchain.
Un protocolo de propiedad intelectual (IP protocol), donde personajes, elementos y propiedades de Flappy Bird estarán “on‑chain”, habilitando licencias abiertas, ingresos automatizados y mercados globales de intercambio o staking.
Modalidades competitivas en línea con premios y mecánicas on‑chain.
Aunque no se ha confirmado una fecha de lanzamiento, se espera una versión beta próximamente, posiblemente en Telegram primero.
Manteniendo el modo Web2
Para quienes prefieren un Flappy Bird clásico, la Fundación lanzó la versión móvil para Android en Epic Games Store. Esta se mantiene como una opción Web2: sin criptomonedas, con anuncios y compras in-app, garantizando que la experiencia tradicional siga disponible.
Los desarrolladores han enfatizado que ambos modos convivirán, permitiendo elegir entre una experiencia clásica o una inmersión con elementos Web3 .
Colaboración con Base (Ethereum Layer 2)
Tras el anuncio del protocolo IP, el equipo de Base, la red Layer 2 de Ethereum de Coinbase, compartió en X una imagen de la hoja de ruta donde se menciona el desarrollo on‑chain del contenido de Flappy Bird. La Fundación lo replicó, lo que ha generado especulación sobre una posible colaboración.
Expandiendo el universo Flappy Bird
La Fundación también trabaja en otros frentes:
Expansión narrativa.
Avatares digitales.
Mercancía y coleccionables.
Modo cooperativo entre usuarios.
Consulta constante a la comunidad mediante encuestas en Telegram.
Según indican, el objetivo es co-crear el futuro del juego junto con los usuarios, no imponerlo desde arriba.
Críticas y postura del creador original
Dong Nguyen, el creador original, ha declinado cualquier vínculo con este relanzamiento y manifestó su rechazo a la integración con criptomonedas. Esta postura generó debate acalorado en la comunidad sobre la dirección del juego.
El regreso de Flappy Bird con integración Web3 representa una mezcla de nostalgia e innovación. Por un lado, promete transformar elementos clásicos en activos digitales únicos; por otro, mantiene viva la experiencia original para quienes la prefieren. Las próximas semanas serán decisivas para saber si esta transición será un éxito o una controversia en el terreno de los videojuegos.