No necesitas una supercomputadora para disfrutar de Counter-Strike 2 con buen rendimiento. Ajustando correctamente tanto tu sistema operativo como las opciones del juego, puedes lograr una experiencia mucho más satisfactoria. ¡Pon a punto tu equipo y prepárate para dar lo mejor en cada partida!
Antes de abrir el juego: optimiza Windows
El primer paso es configurar correctamente Windows. Cambiar el plan de energía a “alto rendimiento” permite que el procesador funcione al máximo cuando lo necesitas. Además, desactivar efectos visuales, animaciones y transparencias puede liberar recursos valiosos que se traducen en más FPS.
Otro paso esencial es asegurarte de que CS2 utilice tu tarjeta gráfica dedicada. Esto se configura desde las opciones de gráficos avanzadas de Windows. También se recomienda desactivar programas que se inician con el sistema y no son esenciales, optimizando así el uso de memoria y procesador.
Si usas una tarjeta NVIDIA, configurarla para priorizar el rendimiento máximo y reducir la latencia también marca una gran diferencia.
Configuración dentro del juego
Una vez en CS2, lo ideal es usar modo de pantalla completa con la mayor tasa de refresco que soporte tu monitor. La resolución puede ser nativa o una utilizada en la escena competitiva, como 1280×960 en proporción 4:3 estirada.
En las opciones gráficas avanzadas, se recomienda:
Desactivar sincronización vertical.
Activar Nvidia Reflex con boost si tu sistema lo necesita.
Mantener un nivel bajo en sombras, partículas y texturas para mayor fluidez.
Usar un nivel de antialiasing adecuado según tu equipo.
Estas configuraciones permiten una buena visibilidad y respuesta rápida sin sacrificar demasiada calidad visual.